jueves, 28 de diciembre de 2017

El post del Viernes: Un año más...o un año menos...

El 2017 ha sido un año distinto, lleno de grandes momentos, de inolvidables experiencias, de algunos miedos y sustos, de algunas incertezas y lagunas. Pero estamos aquí y eso es lo que es únicamente  importante.

El año pasado, para estas fechas, escribía un post similar a este intentando hacer resumen de lo vivido, sentido y hecho durante el año 2016, a 20.000km de casa, en la isla del sur de  Nueva Zelanda. En estos días los recuerdos están muy vivos. Hay muchas personas que me preguntan si hecho de menos vivir allí. A veces pienso que sí y otras que no. Fue una experiencia intensa, preciosa, llena de aprendizajes a nivel personal y profesional, repleta de momentos compartiendo "vida" con personas de más de 20 países diferentes, con historias  chocantes, diferentes y a la vez muy distintas a la propia. Cuando digo que sí que extraño vivir allí es por los paisajes que me acompañaban diariamente, por echar a faltar a algunas de las personas con las que pude compartir mucho y por la vida de "estudiante" que podía hacer allí, estudiar, estudiar y estudiar y preocuparme de poco más. Cuando digo que no es por el frío intenso que pasé, por estar muy lejos de mi gente, por anhelar mi vida en Barcelona y mis escapadas a Andorra que tanto me gustan. Quién sabe si el futuro me lleva a vivir de nuevo fuera alguna vez, podría hacerlo ya que me demostré a mi misma que puedo vivir en la otra parte del mundo y sentirte igual de querida y acompañada...si tiene que ser, será.

Estos días pensaba cómo resumir este año que está a punto de terminar y quiero hacerlo utilizando  colores, una forma distinta de hacerlo. Pienso que mi año ha estado bañado:

De un color azul intenso: del cielo de Queenstown (New Zealand) , de las aguas glaciares del río Shotover, del cielo intenso en las primeras horas del día en Andorra, del azul profundo de unos ojos cercanos...

De un color verde intenso:  de la aurora austral del Polo Sur, de las hojas bañadas de pequeñas gotas al amanecer, de los árboles del Pirineo...




De un color amarillo: del trigo de los campos atravesados el camino de Santiago, de los enormes girasoles de los campos de Castilla, del sol intenso tocando mi piel, de los primeros rayos que entran por los grandes ventales mientras nado, del calor de Fuerteventura...

De un color naranja: de los amaneceres y atardeceres  que me ha regalado el año en muchos ciudades y países diferentes.

De un color negro: de la madrugada mientras corro por las ciudades donde trabajo aun dormidas y solitarias, de los momentos en los que medito, de algunos de los accidentes de  los de casa...

De un color marrón:  de los troncos utilizados en la hoguera de la casa Nueva Zelandesa, de sus paredes en forma de triángulo, de los ojos de muchas de las personas a las que quiero y me rodean, de los diferentes tipo de pan probados,...

De un color gris: de mi portátil que tanto me ayuda a acercarme a algunos de mis sueños y de mi móvil que me permitió comunicarme a muchos quilómetros de distancia y no encontrarme tan sola..

De un color blanco: de las páginas leídas de los libros disfrutados y de los cientos de artículos científicos analizados, de las páginas del blog por escribir que tanto me hacen disfrutar, de las páginas de la tesis que avanzo poco a poco y de los artículos escritos para diferentes revistas, ...

Porque poner color a la vida es aceptar, es aprender a leer la realidad tal como es, con lo bueno y lo menos bueno, tendiendo al positivismo con realismo y al agradecimiento  viviendo en el máximo equilibrio que sólo yo puedo saber cual es...

Gracias por todo 2017...Y ¡Bienvenido 2018! Sólo te pido mucha salud para tod@s, con deseos infinitos de aprovecharte al máximo con: muchos runnings, muchas piscinas nadadas, muchas largas caminatas, muchos viajes, muchos proyectos que me hagan emocionarme, muchas buenas lecturas, muchas conversaciones y risas, muchas meditaciones, mucho tiempo con los míos, mucha ilusión, muchos amaneceres estudiando y dándole la bienvenida al nuevo día, muchos besos y abrazos, muchos aprendizajes para saber más y más...

¡Feliz Año 2018! para todos aquellos y aquellas que pasan por este sencillo y personal blog, a todos os invito a seguir haciéndolo, para mí será un verdadero gran regalo.


 ¡Nos vemos el año que viene!




2 comentarios:

  1. Repeteixo el que he dit altres vegades: ets una poetessa (no sé si es correcte en català, o s'ha de dir poeta) de molt nivell. Feliç any nou!

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  2. Moltes gràcies Miquel!!! gràcies per llegir el blog!

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